miércoles, 2 de septiembre de 2020

SOFIA

 SOFÍA 

No  se  bajó  en  su  estación,  no  pudo,  la  puerta  no  se  abrió.  Quiso  el  destino  que sí  lo  hiciera  en  la  siguiente  parada.  La  muerte  la  estaba  esperando.   

Sofía  era  sabiduría,  alegría.  Su  cara  regordeta,  repleta  de  graciosas  pecas,  le daba  un  aire  pícaro  que  confundía  a  todos. 

Era  fiscal  de  menores.  Ponía  orden y  sensatez  en  la  vida  de  los  más  jóvenes  para  evitar  que  el  futuro los convirtiera en desechos, en marginados sin oportunidades.

Él  se  fijó  en  ella  –imperfecta, como siempre - pensó. 

Lograría  su  objetivo. Había esperado mucho y ahora era su turno para la venganza.

-Buenos días-  dijo con su tono más amable -¿Se  despistó  de  estación?

 -La  puerta  falló-  respondió  ella  mientras  miraba al  hombre  más apuesto  y  galante  que  había  visto  en  su  vida...


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